sábado, 22 de octubre de 2011

Boza.

Como las cosas metálicas se adhirieren al imán
como dos cucharas juntas se atreven a encajar
somos como dos cometas que se arriesgan a escapar de las manos de su dueño.

Fuimos más fuertes que la propia fuerza de la gravedad
pero los polos se invierten, todas las brújulas me llevan a tu mar
y terminaremos rebañándos, relamiéndonos los dedos en señal de rendición.

Resucitarán los muertos cuando pase este calor
los adiestraré en secreto y formaré un ejercito
catadores del veneno que resulte más letal, mis arcángeles de fuego.

Fuimos herejes perseguidos por la santa inquisición
pero de cuerpo presente fue lo más cerca que estuvimos de Sion.

Ha llegado ya el momento de encontrar en las espinas nuevas formas de placer.

jueves, 20 de octubre de 2011

Esta vez no.

No volveré para darte esa fantasía que con tanto acune y anhelo te llevaste como garantía a tu nunca jamás. 

viernes, 14 de octubre de 2011

Qué no le deberás al sol.

Que se opaca cada vez que sonríes.
Y una aquí, amándote y odiándote cada vez que regresas de tu profundo destierro en mi subconsciente para aparecer en mis cortezas y destrozarme la tranquilidad de mi crisálida.

Estoy muy mal de equilibrio.

Corrí escaleras abajo intentando no perder el equilibrio. No subía la mirada por si me entraba el vértigo. Hacía ya mucho tiempo que no usaba transporte público; Y él se mordía las uñas solamente para no tener que hablar.
Insensatos. Insensatos aquellos que no renacieron por miedo a las cicatrices.
Insegura y victimista la que se avergüenza de las suyas, oculta en la torre de su palacete. En esta ciudad ya no hay príncipes de manos frías y besos pegajosos. Los azules no querían pasear con niñas de pelo corto.

sábado, 1 de octubre de 2011

No era eterno.

Qué querrán aquellos que no logramos conservar, que nos lleva a perderlos y que extermina todo ademán de afecto y compasión. Qué provoca su rechazo y su daño. Por qué se vuelven intransigentes con nuestros defectos. De pronto dejamos de hacerles gracia y los despistes que antes les divertían les parecen torpezas inadmisibles, y nuestra risa se vuelve pesadez y nuestras caricias costumbres y nuestra piel, aquella que antes era perfecta, deja de ser imán para sus dedos.

¿Nos apareamos otra vez?

El sabor de tus besos. Una buena conversación. Fluir. Abandonarme en mi galaxia paralela. Perderme entre el gentío de una gran ciudad. Sentir el frío de la mañana. Respirar hondo. La calidez de la amistad verdadera. Fallar, equivocarme y saber rectificar. Tocarte. Conseguir disfrutar el presente de forma prolongada. Saber perdonar. Un baño en alta mar. Sentirme minúscula en la inmensidad. Hacerme gigante en tus caricias. Dormir en el desierto. Contemplar la hoguera de tu cuerpo. Los espárragos silvestres. Canalizar el miedo. Reír hasta llorar. La luz y la oscuridad. Viajar sin día de retorno. Volver a casa.